¿Para qué sirve el Start/Stop?

El Start/Stop es una de las soluciones tecnológicas más exitosas para reducir el consumo del vehículo, el cual apaga el motor durante paradas breves, como por ejemplo, en atascos o semáforos. Te explicamos cómo funciona este sistema, sus méritos y deficiencias.

Creación

Las primeras tentativas de crear un sistema de parón en la inactividad, fueron realizadas en los años 70 por Toyota. El sedán Toyota Crown fue equipado con un dispositivo que apagaba la unidad de potencia transcurridos 1,5 segundos parado.

Más tarde, en la primera mitad de la década de 1980, tecnologías similares fueron implementadas en los modelos Audi 100 y Volkswagen Santana. El motor tenía que ser parado y arrancado manualmente a través de presionar un botón. Para el Fiat Regatta ES, fue propuesta la misma solución tecnológica, pero para volver a arrancar el motor, era necesario presionar el pedal del acelerador. Transcurrido un cierto tiempo, a estos modelos se unieron el OPEL Ascona, Volkswagen Lupo y Audi A2.

Hasta la fecha, la mayoría de marcas más conocidas equipan sus coches con el sistema Start-Stop. Entre ellas se encuentran Peugeot, Citroën, Smart, Volvo, Land Rover, Volkswagen, SEAT, Nissan, Fiat, Bentley, BMW, Ford, Chevrolet, Hyundai, Honda, Jaguar, Kia, Mazda, Toyota y otras.

Tipos de Start/Stop

Las más famosas son las tecnologías desarrolladas por las siguientes empresas:

  • Bosch. Su sistema se denomina Stop&Start. Se trata del sistema más simple y más fiable. Permite reducir el contenido de sustancias nocivas en la composición de los gases de escape en un 8%, y el consumo de combustible en un 15%. Podemos encontrarlo en Audi, BMW, Volkswagen, Fiat, y también en vehículos de otras marcas. Requiere de un arrancador más potente capaz de soportar los múltiples arranques de motor. El sistema está controlado por la unidad electrónica del motor. Su funcionamiento está basado en las lecturas de los siguientes elementos sensoriales: sensor de velocidad del vehículo, sensores de posición del pedal del embrague y pedal del freno, sensor de posición del cigüeñal, sensor del estado de carga de la batería y otro
  • Kia Motors. El sistema es conocido como ISG (Idle Stop & Go). Está organizado basándose en el mismo principio que el Stop & Start de Bosch, pero además de efectuar la parada y arranque del motor, también controla el alternador. Durante la aceleración, el sistema desconecta dicho alternador y toda la carga es transferida a la batería. Al frenar, el alternador vuelve a ser activado, recargando de este modo la batería. Esto implica un ahorro significativo de combustible de alrededor del 6% en ciclo combinado y hasta el 15% durante la conducción por ciudad.
  • Mazda. Se denomina SISS (Smart Idle Stop System – sistema de parada inactiva inteligente) o i-Stop. Éste es compatible solamente con la transmisión automática y los motores de gasolina con inyección directa de combustible. Proporciona un ahorro de combustible de hasta un 9%. El arranque repetido del motor es llevado a cabo mediante la inyección forzada de combustible en los cilindros y a la ignición de la mezcla combustible-aire. Para ello, los pistones son colocados en la posición más favorable para un rápido nuevo arranque durante la frenada. El arrancador sólo se utiliza como fuente auxiliar de energía.

Para conocer más sobre las averías de baterías más comunes, lee el post que hemos dejado en esta línea.

Ventajas y desventajas del Start/Stop

Los atascos en las carreteras son uno de los principales problemas de las megaciudades modernas. Según las últimas investigaciones de la compañía analítica estadounidense INRIX, en 2017, los residentes de Moscú pasaron 91 horas en atascos de tráfico, Londres – 73 horas, París – 65 horas, Estambul – 59 horas, Zurich – 54 horas, Múnich – 49 horas, Oslo – 47. Y esto sólo dentro de 240 días laborables, excluyendo los fines de semana. La conducción en atascos aumenta significativamente el consumo de combustible, y cuanto más combustible se quema, más sustancias nocivas son emitidas a la atmósfera.

La solución de estos problemas es la principal tarea de Start-stop. Mediante la detención del motor cuando su funcionamiento no es necesario, el sistema contribuye a un ahorro de combustible considerable.

Su aplicación tiene además otra ventaja indiscutible. Minimizando el número de horas a ralentí y mediante la adición carga extra a la unidad de potencia a bajas revoluciones, se contribuye al rendimiento óptimo del catalizador, aumentando así su vida útil, y previniendo además la formación de depósitos de carbono en las bujías. En motores diésel, dicho sistema ralentiza la formación de depósitos en la válvula EGR (de Recirculación de Gases de Escape), reduce el consumo de urea, contribuyendo así a una regeneración más eficiente del filtro de partículas diesel.

No obstante, el sistema Start-stop posee algunas desventajas. Se requiere de un equipo más potente, en concreto, un arrancador y una batería. Tales dispositivos son dos veces más caros que los convencionales. Además, con los arranques repetidos se incrementa la carga en los cojinetes del cigüeñal. En una entrevista por parte de la revista británica autocar al jefe de uno de los departamentos del Federal Mogul, Gerhard Arnold, éste observó que un motor convencional era capaz de soportar fácilmente más de 50.000 arranques y paradas. Pero en el caso del sistema Start-Stop, el número de ciclos podía superar los 500.000. En este caso, los cojinetes convencionales se desgastan gravemente ya después de 100.000 arranques.

Otro factor molesto es la demora en el arranque. A pesar del hecho de que este es insignificante (para los sistemas con un arrancador reforzado – 0,8 segundos, con un alternador reversible – 0,4 segundos, con ajuste de la inyección de combustible – 0,35 segundos), muchos conductores todavía sienten malestar en la conducción.

Además, el funcionamiento del sistema sólo es posible si una serie de condiciones tiene lugar.

Los 10 condicionantes para su encendido

  1. El capó y la puerta del conductor están cerrados.
  2. El conductor lleva puesto el cinturón de seguridad.
  3. La velocidad del coche es al menos de 4 km/h.
  4. El motor está calentado lo suficientemente.
  5. La velocidad de la unidad de potencia no excede los valores nominales para el régimen de ralentí.
  6. El descongelador / eliminador de escarcha de la ventana está apagado.
  7. La temperatura interior, del habitáculo, no difiere en más de 8 grados del valor establecido. Esto es relevante para la temporada de frío.
  8. La carga de la batería no se encuentra por debajo del valor preestablecido para el sistema. Por ejemplo, para ISG este es del 75%.
  9. El alternador está completamente operativo.
  10. El ángulo del volante es insignificante.

Conclusiones

Los esfuerzos de muchas empresas están dirigidos en la actualidad a la mejora del sistema Start-Stop. Por ejemplo, la empresa británica Millers Oils ya ha introducido en el mercado mundial aceites de motor capaces de reducir la fricción de las partes del motor, así como su desgaste y rotura, en un 50%. Según el director técnico de la compañía Martyn Mann, este y otros productos similares deberían contribuir a promocionar activamente las tecnologías Start-stop. Otras fabricantes están trabajando en la creación de cojinetes más fuertes y resistentes. Mientras que los ingenieros de Bosch, Valeo, Denso y muchos fabricantes de automóviles están trabajando para lograr reducir el tiempo de arranque de la unidad de potencia.

Pero a pesar del hecho de que el sistema todavía posee carencias, y del ahorro que proporciona, considerando el coste relativamente elevado del equipo, esto parece insignificante, ya que, según los expertos, esta tecnología tiene un gran futuro. Al fin y al cabo, los beneficios que aporta al medio ambiente son indiscutibles.

Auto Sport Moraleja es un concesionario multimarca con más de 300 vehículos ubicado en Arroyomolinos, Madrid.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *